domingo, 30 de octubre de 2011

TREKKING DEL LANGTANG DIA 2. De Lama Hotel a Kyajin Gompa, 1 oct

Vista hacia el Kangla Himal, con montañas de 5.800m de altura, vistas desde Kyagin Gompa

TREKKING DEL LANGTANG DIA 2
De Lama Hotel a Kyagin Gompa

1 octubre 20011

Blanca de las nieves y Jorge García-Dihinx

En nuestro segundo día del trekking del Langtang también queremos hacer dos etapas en una misma jornada, subiendo desde Lama Hotel (2.470m) a Kyajin Gompa (3.870m). Tenemos que ir ganando días para poder luego enlazar al trekking de Gosaikund y poder volver con algún día de margen a Kathmandú antes de nuestro vuelo de regreso a España.

La primera etapa sube a Langtang (3.430m) en unas 4-5h, según la guía. Desde allí sólo quedan 2-3 h para llegar a Kyajin Gompa (3.870m). Debido al mal de altura que algunos senderistas sufren al subir esos cerca de 1.500m en un día, la guía aconseja quedarse en Langtang y hacer una corta etapa al día siguiente. Pero no haremos caso. Somos traviesos.

Repetimos la jugada del día anterior y salimos al alba (5:40h) sin esperar a los desayunos, para ganar horas de luz al día. El comienzo del día es duro psicológicamente. El día ha vuelto a amanecer cubierto y nos vuelve a amenazar la lluvia de este monzón que no termina de irse.
Pero estamos ya en Octubre! No?
"Octubre, ya has oído, señor monzón: Hora de largarse".

Salimos entre la vegetación de este valle, sin apenas luz y de nuevo en ese bosque tan verde pero tan cerrado, con una senda repleta de subes y bajas que nos bajan algo la moral. Nos preguntamos: ¿Se abrirá el día? ¿Se abrirá el valle por fin?
Algo más de 1 horas tras la salida paramos a desayunar unos deliciosos chapatis con miel y té nepalí, en Gummachowk. Reanudamos la marcha y pasamos por Ghora Tabela (2.970m), donde una chica que habla un inglés perfecto de la muerte nos recomienda la casa de su cuñado en Langtang para parar a comer el lunch. Se trata del Pilgrim Guest House (qué acierto, veríamos luego). Por fin el valle se abre y salimos de la oscuridad. También parece que se va abriendo el cielo y nos animamos más.

Llegamos a Langtang sobre las 10:30h, con un hambre feroz. El sol empieza a lucir. Bieen! Paramos, aunque parece pronto para el lunch, a comer en el Pilgrim. Mientras nos preparan unas deliciosas tortillas con patatas, nos tomamos varios tés y nos seguimos leyendo, en voz alta el uno al otro, el interesantísimo libro de Anatoli Bukreev que nos hemos traído: "Everest 1996" (en inglés, "The Climb").

Salimos bien saciados, a recorrer las 2-3 h que nos separan de Kyajim Gompa. El paisaje se abre. El bosque da paso al matorral bajo y divisamos al fondo, entre las nubes, montañas con nieve en sus laderas. Qué diferencia de paisaje en sólo unas horas... yendo a pie!

Por fin llegamos a Kyajim Gompa (3.870m). En las últimas rampas se notaba la altura y el cansancio de subir a casi 4.000m. Desde un lomo al que llegamos sin ver nada, se divisa por fin toda la aldea, asentada sobre una gran llanura glaciar. Son casas y paisajes similares a los de Namche Bazaar en el trekking del Everest. Luce el sol y de momento no hace frío. Nos encanta este lugar! Nos ha costado, desde esta mañana, unas 8 horas en total.

Vemos cómo aparecen dos mujeres que van andando decididamente hacia nosotros. Nos quieren enganchar y llevarnos a su "hotel" antes de otros hagan lo mismo y así asegurar dos clientes más en este principio de temporada de trekking que todavía apenas hay gente (clientes).
No recuerdo el nombre del lodge o hotel, pero sí recuerdo el salón acristalado que tenían, donde entraba la luz a raudales y se estaba calentito, leyendo, descansando, de maravilla.

Aprovecho para darme una vuelta por el pueblo y fotografiar las casas y las montañas nevadas que nos rodean. Las cimas están cargadas de las nevadas del final del monzón. Sus caras norte verticales muestran esas canales de nieve triangulares o romboidales que desafían a la gravedad, tan típicas de Bolivia y Perú (Alpamayo, Siula Grande). Las nubes no nos dejan ver todo el valle pero el verse asomar estas montañas nevadas nos impresiona. Qué magnífico lugar.

Al caer el sol, también lo hace la temperatura y volvemos a hacer uso de nuestros nuevos Primalofts.
Va a ser nuestra primera noche en altura. Blanca se encuentra perfectamente, como ya le ocurrió en el Mont Blanc, sin ningún problema. Yo tengo un leve dolor de cabeza, que remedio con un ibuprofeno y, de paso, me tomo 1 comp de Edemox (diurético) para facilitar la aclimatación. Esa tarde me la paso meando cada dos por tres, pero me encuentro muy bien. Cenamos con un grupo de 4 australianos jubilados que llevan 3 meses viajando por el mundo y luego leemos un rato más antes de irnos a dormir. Esta va a ser nuestra primera noche en altura. Y sólo llevamos 2 días de trekking! Qué rápido pasa todo! Y sin, embargo, qué lejano parece nuestro viaje en bus a Dunche, que fue hace sólo 2 días...

La noche la pasamos perfectamente y dormimos como benditos. Ni mal de altura ni frío ni na. Pero qué buenos sacos tenemos! Y qué ligeros son!
Mañana haremos una excursión a la base del glaciar y, tras volver al hostal a tomar el lunch, iniciaremos el descenso de nuevo a Langtang. Querríamos habernos quedado quizás 1 ó 2 días más por aquí, pero no estamos seguros de los días que nos va a costar  la vuelta a Kathmandu por el trekking de Gosaikund y necesitamos algún día de margen para no apurar.
Nos vamos a dormir.
Continuará.

 Mapa de recorrido del día (Escala 1:125.000)

 Salimos sin apenas luz, en el bosque húmedo del Valle de Langtang

 La humedad es tal, que los helechos nacen de las ramas de los árboles

 El valle se va abriendo y salimos por fin del bosque

 Cruzamos nuevos puentes colgantes. Al fondo de advina Langtang, dondes tomaremos el lunch

 El trekking se separa aquí del río Lantang Khola

 Por fin llegamos a Kyajim Gompa! Nos encanta este lugar... pues luce el sol!

 Desde el pueblo vemos los cimcomiles aparecer tras las nubes

El salón de estar, acristalado, era ideal para leer y descansar al solecito.
Blanca de las nieves y los 4 australianos jubilados, tan simpáticos

 Paredes norte nevadas delante nuestro



Canales triangulares de nieve que desafían a la gravedad

 Banderines de oración

 Vista hacia el pueblo, desde el norte

 A esta altura (3.870m) ya toca abrigarse, hasta la cabeza

Quizás sea esta el pico Pnggen Dopku, de 5.928m 

 Impresionantes paredes norte del Kangjla Himal

Esta niña nos miraba en la puerta de la cocina, poco antes de cenar


Continuará...


El resto de las fotos de este breve álbum las podéis ver pinchando aquí



miércoles, 26 de octubre de 2011

TREKKING DEL LANGTANG, DIA 1. De Dunche a Lama Hotel, 30 sept (NEPAL)

Verdes bosques en el tramo de Thyulo Barkhu a Thulo Syabru



TREKKING DEL LANGTANG DIA 1,
De Dunche a Lama Hotel (NEPAL)

30 septiembre 20011

Blanca de las nieves y Jorge García-Dihinx



Mapa 1:125.000m de la zona que recorreremos los primeros 4 días


 
Tras las 9 horas infernales del autobús a Dunche, pocos trekkers toman de nuevo ese bus para regresar a Kathmandu y eligen como mejor opción volver a pie por el trekking que recorre los altos lagos de Gosaikund y se une al sur con el de Helambu.

El trekking de Gosaikund viene a durar 1 semana. El problema que tiene es que hay 2 ó 3 etapas extremadamente cortas. Debido a la rápida ganancia de altura, se recomienda hacer dos etapas muy breves, de poco más de dos horas, con fin de evitar el mal de altura. Para evitar esto, la mayoría de la gente hace antes el trekking del Valle del Langtang, que sube a 4.000m, para así aclimatar previamente y luego acometer el de Gosaikund con más rapidez en las etapas. El recorrido del valle del Langtang también viene a costar 1 semana aproximadamente.
Para hacer los dos trekkings necesitamos entre cerca de 14 días, pero sólo tenemos 10 días. Como vamos ligeros y sin porteadores, ni guías, podemos ir al ritmo que deseemos e intentaremos doblar etapas para acortar días. Así que decidimos probar con ambos trekkings.

Tras la experiencia en el año 2000 del trekking de los Annapurnas, uno aprendió a traer y portear sólo lo imprescindible. Es importante poder ir ligero, pues se agradece tanto en las subidas como en las bajadas.
Antes de salir de España, conseguimos unos milagrosos sacos de dormir relativamente pequeñitos y que aguantarían temperaturas de 4ºC sin problemas. Con esta jugada y siendo austeros con el equipaje, habíamos conseguido meter todo en nuestras mochilas pequeñas de 32 litros que solemos llevar en las excursiones de un día en el Pirineo.

 Estaba decidido, nos lanzaríamos a probar el trekking de Langtang primero y enlazar luego en el de Gosaikund. Después de la Monte Perdido Extrem en 2 días, creemos que podemos intentar esta doble ruta.

Para empezar el trekking del Langtang, normalmente se coge otro bus en Dunche (otro bus más??? Nooo!!!!) y se desciende desde los 2.000m de Dunche, yendo al norte, hasta los 1.400 m de Syabrubesi. No queremos perder otro día en autobús y elegimos tomar la ruta directa a Thulo Syabru, pueblo situado entre el Langtang y Gosaikund. Desde allí empezaremos el trekking subiendo de Thulo Barkhu a Thulo Syaphru para luego bajar y entrar por fin en el valle del Langtang. Esto conllevará una larga jornada, pero la haremos íntegramente a pie, sin más autobuses, ni esperas ni horarios.

Así que, en nuestro primer día de trekking, decidimos levantarnos a las 5 AM, tomar unas chocolatinas y salir andando desde Dunche a las 5:30 h, cuando empezaba a clarear, sin esperar a los desayunos del hostal (lodge).
Desde Dunche andamos por la carretera durante hora y cuarto para recorrer los 7 km que nos separan de Thulo Bharku (2.140m). Tras atravesar el pueblo y cruzar un río, a la altura de unas banderas nepalíes verticales de oración, tomamos una senda que sube en una escalera de piedras a la escuela del pueblo. Desde allí sale la senda (indicada con flechas rojas) que nos llevará a media ladera por una selva verde preciosa, hacia Thulo Syabru, aldea de enlace entre ambos trekkings.


 Salimos de Dunche al alba, mientras el pueblo aún duerme


 Paisajes verdes en cuanto entramos en la senda que nos llevará a Thulo Syabru


 Pinos, rododendros y mucha humedad


 Blanca, rodeada de verde en todo momento


 Senda a media ladera sobre una selva diagonal


 El tramo de Thulo Barkhu a Brabal está conquistado por los monos. Vimos muchos, pero no vimos al osito panda, tan famoso de estos lugares

Senda sencilla en un entrono precioso


Este primer tramo nos deleita con su vegetación. La senda sube fuerte inicialmente y más adelante se suaviza. Estamos solos, no vemos a nadie, pero la ruta es clara. No tiene pérdida y, si hay alguna bifurcación, vuelven a aparecer las flechas rojas que nos guían en la buena dirección. El camino discurre por el medio de un bosque verde de pinos y rododendros. Los monos saltan de rama en rama, sorprendiéndonos de repente con un gran alboroto. Es como estar en el zoo.

El monzón aún no termina de retirarse y de vez en cuando llueve débilmente, así que llevamos el cubre mochilas. El de Blanca es de un color amarillo que destaca en la vegetación y en todas las fotos que le voy haciendo, caminando siempre detrás de ella. Se lleva casi a una foto por minuto. Es que el paisaje es increíble. Tan verde y lleno de color...

Tras 1 hora y media por la selva, paramos a desayunar en Brabal, un conjunto de casas en mitad de la montaña. Allí nos ponemos las botas con un magnífico desayuno. Antes de irnos, la señora, que apenas habla inglés, nos ofrece hachis (???). Debe ser de consumo habitual en los trekkers, pensamos...

Parada a desayunar en Brabal

Poco después de dejar Brabal, ya divisamos el pueblo de Thulo Syabru


Seguimos subiendo hasta un lomo y luego iniciamos el descenso a la aldea de Thulo Syabru (2.250m) , muy poblada al ser el nexo de unión entre los dos trekkings. llegamos a ella algo más de 1 hora tras nuestra parada a desayunar.


 Niños en Thulo Syabru


Blanca de las nieves, descendiendo hacia Langtang pasando por ls casas de Thulo Syabru

Pasamos sin detenernos y seguimos descendiendo para introducirnos por fin en el valle del Langtang. Para ello cruzamos primero uno de los largos puentes colgantes tibetanos que veremos esos días.


Puente colgante para ir de Thulo Syabru al descenso para entrar en el valle del Langtang


Descenso vertiginoso al Valle del Langtang. Sabemos que dentro de unos días tendremos que volver a subir por esta senda para volver a Thulo Syabru antes de iniciar el trekking de Gosaikund


El valle del Langtang en su parte inferior tiene una gran forma de V estrecha, muy cerrado y lleno de vegetación.

Estrecho, verde, angosto, el valle del Langtang en su parte inferior. Vista desde Brabal.
Hoy recorreremos casi todo el tramo que se ve en la foto.
A la derecha se ven las casas de Thulo Syabru, hacia donde vamos primero. Desde allí toca bajar a la izda al fondo del largo y estrecho valle del Langtang

Subimos por el lado derecho (margen orográfica izda) del Valle del Langtang, por una senda, que sube y baja constantemente. Algo habitual en las sendas del Himalaya que siguen el curso de un río en un valle. Suben, bajan, suben y bajan y miras el desnivel en el reloj y ves que te queda más de lo que pensabas...


 Subiendo por la margen izda del río Lantang Khola

 Raramente nos cruzamos con trekkers estos primeros dias de final de septiembre


El barro sigue estando presente. Todo está mojado y lleno de color

Dos horas tras nuestro paso por Thulo Syabru, paramos por fin a comer en el Bamboo Lodge, donde reponemos fuerzas. Aún nos quedarán 2 horas más hasta llegar por fin a Lama Hotel, a unos 2.500m de altura.

Pienso que deberíamos subir algo más arriba, a alguna aldea más adelante, con la idea de iniciar nuestra aclimatación cerca de los 3.000m, pues al día siguiente queremos dormir a 3.900m. Pero llevamos ya 9 horas de excursión y decidimos que ya está bien para ser el primer día.


Paraje insólito, de verdes colores y tan solitario... Sólo para nosotros

Por fin llegamos a Lama Hotel (2.470m)  y escogemos lodge sin problemas, pues apenas han llegado trekkers todavía. Es pronto en la temporada y la gente suele llegar ya entrado Octubre, para evitar los últimos coletazos del monzón de finales de septiembre o inicios de octubre.

Blanca, cruzando por la cocina de la casa, adyacente al salón de huéspedes 

Ducha caliente y lectura antes de la cena. Blanca aprovecha para escribir nuestro día en su diario de viaje, mientras a su lado, la mujer de la casa se pasea con la cuna colgada a la espalda, acunando al bebé que llora y que no se quiere dormir. Esa escena es la última foto del álbum de este primer día.


 Blanca escribiendo el diario de viaje, abrigada con su nuevo Primaloft


 Una buena cerveza para termiar el día, con galletas tipo Tuc-Tuc nepalíes, para reponer sales

Blanca escribiendo, junto a nuestra cerveza Everest. Merecido descanso.


Mientras Blanca escribía, la señora de la casa acunaba al bebé en la cesta que portaba a la espalda, pasándose por la habitación a nuestro lado.


No hemos llegado hasta tan arriba como desearíamos pero estamos muy contentos. Apenas no nos ha llovido y hemos recorrido varios valles en el mismo día. Hemos visto monos saltando de rama en rama, paisajes verdes increíbles y gente muy agradable, que se apañan con el inglés justo para las 4 palabras necesarias para regentar los lodges donde los trekkers nos alojamos. Han sido 9 horas de trekking (sin perdernos) y en un entorno mágico.

Mañana también doblaremos etapas, pasando de largo el pueblo de Langtang (3.430m)  y subiendo del tirón a Kyaging Gompa, a casi 3.900m.

Tendremos mal de altura?
Bueno, sólo está 100m más alto que el refugio de Gouter en el Mont Blanc. Nos irá bien.
Cenamos a lo grande a las 7 de la tarde (anochece a las 5:40 h) y poco después de las 9 estamos ya descansando.
Mañana nos volveremos a levantar sobre las 5.
Ufff... A dormir.

Continuará...

Jorge

Para ver el resto de las fotos, podéis pinchar aquí

sábado, 22 de octubre de 2011

EL VIAJE A DUNCHE, 9 horas en bus desde Kathmandu, 29 sept

Aglomeraciones en el lugar se salida de los autobuses. Nadie te dice cuál es tu autobus. Este salía antes que el nuestro. Todos los buses tienen escalera lateral y posterior para subir y bajar del techo del bus, lugar igual de concurrido que el interior


EL VIAJE A DUNCHE, 9 horas en bus desde Kathmandu

Blanca de las nieves y Jorge García-Dihinx

29 septiembre 2011
Para empezar el trekking del Langtang, debemos ir primero a Dunche, a unos 115 km de Kathmandu, en un viaje en bus que nos costaría más de 9 horas.
No sabíamos lo que nos iba a deparar ese billete de bus, imprimido sobre un papel rosa y comprado el día anterior.

En teoría el bus salía a las 8:30 AM, pero el de la taquilla me dijo de estar allí a las 8. Por lo visto, en el billete, pudimos ir averiguando cosillas que tenía escritas. En donde pone "Arrival time" no es la hora de llegada al destino sino la hora de llegada del pasajero al punto de salida.

También pone un número de 4 cifras que, preguntando a la gente, averiguamos que era el nº del autobús, que está pintado en la parte de atrás.
Así que por fin, entre tanto bus que llega y se va y el alboroto de la gente que sube y baja, por fin veo un bus con nuestro número en la parte trasera. Son las 7:55 AM y, como ya se está llenando, Blanca y yo subimos pronto, para poder coger sitio.
Al poco, nos echan de nuestros asientos pues, para nuestra incredulidad, los asientos estaban numerados! Los nuestros eran el 12 y 13 de la fila B (izda), los dos últimos, donde las piernas ni cabían...
En eso arranca el autobús y nos vamos. Pero si aún son las 8 y 10! No salía  a las 8:30??
Menos mal que habíamos llegado con margen de tiempo, que si no...
Pues ala, empieza el espectáculo.

Dentro del bus cada uno viaja como puede, unos sentados apretujados entre los asientos. Otros, los que cogieron el billete más tarde que nosotros (que cogimos los últimos dos asientos) viajan de pie en el pasillo o sentados sobre algún saco, entre las gallinas.

El bus realiza una parada a las 3 horas en mitad de la selva, para estirar las piernas e ir al baño. Aprovecho la parada para subirme en el techo, donde aguantaré sólo hasta que vuelva a parar. La rejilla del tello hace que te claves las barras en cada bache, teniendo que agarrarse uno como en los rodeos americanos, para no sufrir en las posaderas con el vaivén.

Vuelvo al bus, pero claro, ya no tengo sitio. Así que me quedo en el pasillo, sentado sobre un gran bidón blanco en el centro.
De repente llegamos a un tramo cortado por las lluvias. Por ahí el bus no va a pasar. Todos los pasajeros se bajan y echan a andar. Nosotros hacemos lo mismo. Justo en ese momento se pone a llover. Sacamos el paraguas y los cubre-mochilas.
Tras cruzar al otro lado de los deslizamientos de tierra vemos que todo el mundo se ha metido en un camión!
¿Nos llevará el camión a nuestro destino?

Pasa el tiempo y el camión ni se mueve. Sale el sol y la gente sale del camión. Por lo visto era un lugar de cobijo hasta que llegue, del otro lado, el bus que realiza el tramo final a Dunche.
Como no llega y vemos que algún trekker con guía nepalí echa a andar, decidimos Blanca, yo y algunos trekkeres franceses, empezar a andar por la carretera.

Al final de la tarde vuelve a ponerse a llover y a base de bien. Nos refugiamos en el porche de una casa que vemos a la orilla de la carretera. Del interior de la casa sale un niño con una camiseta de tirantes. Sería la última foto que haría esa tarde.

Al poco, ya anocheciendo, llega por fin el esperado bus. Va lleno hasta los topes. Salimos a la carretera e indicamos para que nos pare (aquí se hace todo así, no hace falta estar en ninguna parada concreta del camino).
Nos dicen de subir al techo, claro, pues no hay sitio abajo.
Allí arriba compartimos la lluvia y los baches con otros pasajeros, gallinas y cabras, que se arrejuntan a nuestras piernas para entrar en calor.
Con una mano en el paraguas y otra en la barra para agarrarme, no me quedan manos para hacer fotos en este tramo final tan "apasionante". El revisor trepa cual chimpancé al techo, en mitad del viaje, pidiéndonos el importe de este trayecto "extra". Pero claro, con qué mano le doy el dinero??
Le dejo el paraguas al niño que tengo sentado a mi lado, que se ha arrejuntado a mí para protegerse de la lluvia. Así aprovecho para sacar los billetes y dárselos al revisor.
Al poco veo a Blanca con la cara del color de su mismo nombre. Miro adelante la carretera, que ya no es carretera sino rocas con huecos del tamaño de lavadoras.
¿Por ahí vamos a pasar??
A nuestra derecha, la montaña, a la izda, el abismo y delante nuestro una cosa informe que es todo menos una carretera. Más bien un río de rocas mojadas por donde no sabemos cómo quiere quiere pasar el autobús.
Volcaremos?
Hacia dónde deberíamos saltar?
Saltamos al volcar o antes, para que no nos caiga todo el bus encima?
Cómo grito en nepalí para que pare el bus y nos bajemos?
Aysss...

Total, que el conductor sigue en el silencio del momento. Va avanzando muy lento, como a trompicones, topando con las rocas y superándolas, encajando poco a poco el bus como si fuera una pastilla de jabón que uno empuja con cuidado, al borde el abismo... Nadie dice nada. Sólo nos miramos y ponemos caras de circusntancia, de pensar que esto pasa todos los días y no ocurre nada (aunque unas horas antes habíamos visto los restos de un autobus caído en un cortado...).
Tras estos ratos de tensión, por fin la carretera vuelve a mejorar y acabamos llegando a Dunche. Ufff...
Entramos en la oficina del Parque Nacional del Langtang, donde nos tramitan los permisos de entrada. El militar rellena nuestros datos mientras le ilumino con mi frontal pues la luz de la casa es bien pobre. Salimos y andamos el último kilómetro hasta llegar al pueblo.

En Dunche entramos en un pequeño hostal, donde incluso tenemos ducha caliente y nos damos una buena cena de celebración del final del día.

Mañana madrugaremos para iniciar nuestra primera etapa del trekking. Queremos hacer 2 etapas en una, para que nos de tiempo a recorrer el valle del Langtang y luego, ya aclimatados, volver y enlazar con el trekking de los lagos de Gosaikund. A ver cómo se nos da.
Hasta mañana pues.
Continuará...

La interesante crónica de Blanca de las nieves sobre este día, la podéis leer pinchando aquí


 Taquilla de billetes perdida en un lugar de la ciudad, donde el día anterior conseguimos comprar el billete del bus.

 Blanca, contenta tras haber encontrado los billetes. 400 rupias por dos pasajes (4 euros). Se puede leer el Arrival time: 8 AM, que no es la hora de llegada a destino (eso nadie lo sabe) sino la hora de llegada del pasajero a la "estación", media hora antes de la "salida oficial de las 8:30"

 Las familias hacen acopio de botellas de agua para el largo viaje

 La distribuidora de agua haciendo su ronda antes de la salida del bus

 Parada para ir al baño a las 3 horas de la salida

 Aprovecho la parada para subirme al techo del bus, donde aguantaré agarrado hasta la próxima vez que pare


Durante un rato aguanté arriba en el techo del bus, agarrándome a las barras para no caerme. Conseguí liberar una mano para grabar con la cámara un pequeño tramo, para grabar este pequeño vídeo.

Lo podés ver pinchando aquí


 Chica nepalí sentada en el pasillo del autobús sobre algún saco


 Nueva parada en otra aldea, donde se unen algunos pasajeros más.
Pero aún cabe más gente??


 Las lluvias del monzón hacen estragos cada año en el tramo final de la carretera. Por ahí no iba a pasar el bus, así que toca echar a andar


 El camión donde nos refugiamos de la lluvia. Pensando que ése era nuestro transporte hasta Dunche...


 En el interior del camión cada uno se mete donde puede. Al fondo estaban las gallinas y las cabras


 Luces y sombras en el interior del camión


 Deducimos que este camión no va a ninguna parte. Todos afuera de nuevo, que parece que sale el sol


 A falta del paraguas de mamá, vale el de tía Blanca


 Compartiendo momentos de sol y lluvia


Niños jugando al borde del abismo


 Decidimos echar a andar, pensando que Dunche estará ya cerca


 En la otra orilla del río vemos aldeas situadas en zonas remontas
¿Cómo van los niños al cole desde allí?
Por la senda que se ve en los arrozales de abajo??

Niño saliendo de casa al porche donde nos resguardábamos de nuevo de la lluvia.
Allí cogeríamos el último bus de la muerte, en un tramo final aterrador.


Al día siguiente empezaríamos el trekking del Langtang.

Continuará...